El Banco Central de Perú redujo levemente la proyección de crecimiento del país para 2022 y el 2023 de 3% a un 2,9% por las protestas en diferentes puntos del país.
El impacto de las protestas repercute en el costo de vida, el cual podría acelerarse en el corto plazo, frenando la distribución de alimentos por los bloqueos. Además, esto configura un incremento de pérdidas, que en estos últimos días ascienden a 21,05 millones de dólares diarios, según datos ofrecidos por el Ministerio de Economía de Perú.
“Con respecto al PBI por sectores económicos, lo que hemos reducido para 2023 es la proyección de crecimiento de 3% a 2,9% por dos factores: el mismo crecimiento observado a octubre y el efecto marginal que esta teniendo estas protestas que han afectado la actividad económica”, indicó Julio Velarde, titular del organismo.
“Estamos esperando un crecimiento de 2,9% por los datos que tenemos ahora. Vale la pena destacar que para el 2024 también esperamos un crecimiento similar por más de 3 por ciento”, concluyó.
